Erzbischöfliches Palais (Palacio Arzobispal)
Desde el siglo XIV se encuentra aquí, en el lado sur de la Plaza de la Catedral, la sala de reuniones de los “Adeligen Trinkgesellen” (“nobles compañeros para beber”) de la Asociación de Caballeros de Breisgau.
Su Presidente Ferdinand Sebastian von Sickingen Hohenburg hizo construir este edificio barroco en 1756, justo al lado del Almacén Histórico. Un año después de su construcción, los caballeros vendieron su casa social a los legisladores de la ciudad, quienes la usaron hasta 1806 como lugar de reuniones, y luego pasó a formar parte de la Corte Granducal.
Tras la fundación del Arzobispado de Friburgo, Bernhard Boll fue el primer arzobispo que se trasladó al edificio en 1832, denominado a partir de ese momento Palacio Arzobispal y utilizado como tal hasta 1944. Después de su total destrucción en la Segunda Guerra Mundial, fue reconstruido respetando la sustancia del histórico edificio. Se conservó la fachada barroca y tan solo se renunció a las antiguas contraventanas.
Actualmente, 350 talentosos niños y niñas de la famosa Escuela de Canto de la Catedral, ensayan en la Sala Mozart y del Episcopado. Las habitaciones del Palacio Arzobispal, así como su correspondiente Capilla de la Catedral, se usan tanto como salas de ensayo, como para la enseñanza de música.