Basler Hof (Corte de Basilea)
La historia del edificio “Basler Hof” (Corte de Basilea) es tan movida como conmovedora: varias casas burguesas tuvieron que ceder su lugar a finales del siglo XV a este representativo edificio secular, porque Konrad Stürzel, canciller de la corte del emperador austríaco Maximiliano I, hizo construir aquí un palacio de ciudad en su nombre.
A lo largo de los siglos siguientes, el edificio cambió de propietario a menudo. Entre otros usos, sirvió al cabildo de Basilea a partir de 1587 como edificio residencial y administrativo. El nombre de “Basler Hof” se remonta a ese tiempo.
Cuando, casi 100 años más tarde, las tropas francesas, bajo el mando de Vauban, convirtieron Friburgo en una gigantesca fortaleza, se instalaron en este representativo edificio. En 1687 pernoctó en el “Basler Hof” el rey Ludwig XIV, durante una visita relámpago para examinar sus territorios conquistados.
El lado oscuro y poco conocido de este edificio medieval tuvo lugar durante la Segunda Guerra Mundial, cuando la Gestapo, entre 1933 y 1941, torturó a los opositores del régimen en el sótano. Puesto que el “Basler Hof” fue totalmente destruido durante el bombardeo del 27 de noviembre de 1944, apenas hay testimonios escritos de las atrocidades allí cometidas.
Tras una reconstrucción del “Basler Hof” totalmente fiel al edificio original, con su portal del Renacimiento, es desde 1952 la sede de la Presidencia del Gobierno de Friburgo. Desde entonces, reina la paz en este lugar. Tan solo una vez al año, cuando se anuncia la “quinta estación”, los bufones del Carnaval llenan el lugar de alegres y ruidosas risas.